EL SE CALENTO Y YO ME DERRETI
Un dia comenzó y sin pensar lo que pasaría nos embarcamos en el mar de trafico de esta cuidad hecha entre los baches mas mexicanos que gringos... jajaja algo lógico, creo yo. Any way... eran las dos de la tarde y yo llegaba precisamente a tiempo, todo estaba normal y yo sonreía, ella estaba ahí con su vaso de un restaurant de comida rapida y con su minifalda de mesclilla, él se quedó esperando mientras nosotros llegabamos hasta donde estaba... Nos fuimos y subimos hasta donde no habian pisado mis pies, entonces pasó, comenzó a subir su temperatura, en un principio no fué un big deal, teniamos que detenernos y el dijo que quería pensar, nosotros platicamos más, teniamos muchas cosas que decir. El dijo esta bien, y seguimos, llegamos al primer destino, agua, sudor, calor, el sol, nosotros, la temperatura, un ambiente calido. Entramos, comimos, reimos, fotos, cuadros, cajas, pinturas, cigarros. El verde y el negro, agua y calor, sudor y vapor, salimos y el estaba esperándonos con una sonrisa, al parecer ya se sentía bien... Comenzamos a vagar por la cuidad, solamente con el disfrutar de nosotros, de nuestras risas, de las pláticas, del vivir. Llegamos a ese lugar con tantos recuerdos, buenos, malos, nostálgicos, pispiretos, con música para bailar, yome orie, y el se quedo esperando fumando aire, con las piernas abiertas. Nosotros lo veíamos desde la ventana, siguieron las pláticas, las risas, los recuerdos, mientras tomabamos más y más, salimos otra vez estabamos los tres y llegamos a esa plaza, estaba a reventar, una emoción la llenó a ella, y yo seguía sin entender, creo que las mujeres son complicadas pero, asi como dijo ella: "es mejor no entenderlas, solo quererlas", pero bueno... uno como hombre a veces trata y no puede. Las ideas que se tienen de mi, que a mi parecer son equivocadas, las ideas que yo tengo de las mujeres, que a su parecer son equivocadas, quien sabe... la neta ya no quiero saber. Salimos, el calor estaba en la piel, en el aire, en todo. Salimos y comenzamos a llegar otra vez, paramos en unos baños, el agua lo tuvo que refrescar, pero pasando un momento se empezó a sentir distinto, más caliente, más caliente, tan caliente que no ya no podía sportar estar así. Es que ya no quería esperar, nos paramos... pero él no supo que decir, asiq eu solo tomamos agua y decidimos seguir. Yo me derretía cada vez que lo veía, mi cara parecía arder, ya era la cuarta vez que solo estabamos él y yo, mientras lo tocaba el se ponía más caliente, el vapor nos quemaba, el gua no servía de nada. Regresé a mis cabales y fui con ella, quien solo me decía: "calmate no hay nada de que avergonzarse, eso es algo que pasa muy frecuente, tu y él han pasado mucho juntos", en verdad tenía razon, tantas cosas que nos unían, que simplemente no me había podido despedir cuando nos ibamos a separar, pero estabamos juntos ahora en el día más caliente de la historia de la cuidad. LLegamos a la última morada, que en verdad era la primera parada, agua y más agua, tensiones sin razones, besos e infidelidades, cremas en el cuerpo quitadas por la lengua, el ambiente se viciaba al rose de nuetra ropa de nuetros cuerpo de nuestra piel. Ya era tarde, ella se quedó y ahora solo ibamos a quedar él y yo. La noche era fresca y el aire lo hacía parecer más grande, despues de casi perdernos llegamos al boulevard, la vía rapida y seguiamos sin música, él escuchaba mi respiración y yo no dejaba de verlo. Llegamos a mi casa, por fin estabamos solos, en la oscuridad de la noche, con el rocío del cielo, afuera del portón. El estaba caliente y no lo podía evitar, las subidas lo ponían cada vez más. Lo toque y él rosó mi piel, primero se la abrí y despues de un rato se lo saqué y pronto el líquido bañó todo, los vapores inundaban el aire fresco, los vidrios estabn casi empañados y yo me seguía derritiendo cada vez que me acordaba. Ya no supe más, solo nos quedamos sin hablar. Me despedí, le di las gracias y un sonrisa se calló de mi cara mientras cerra la puerta de mi casa. Quien iba a pensar que este sería un día para recordar.
Esto fue lo que me pasó en un dia con Sarah y con él carro que se calentó cuatro veces y yo me derretía de la pena, pero bueno... cada quien lee lo que quiere leer. Jajajajaja!
Esto fue lo que me pasó en un dia con Sarah y con él carro que se calentó cuatro veces y yo me derretía de la pena, pero bueno... cada quien lee lo que quiere leer. Jajajajaja!
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