EL OTRO YO

No se que me pasa. Fue como un switch que cambió todo. Como una mala noticia. Como un balde de agua helada en una noche de noviembre. Y luego llega él y dice tantas cosas, pone tantas ideas en mi cabeza. él, el que razona las cosas mil veces y le encuentra siempre el lado negativo, quien ve el final trágico en la comedia. Se apodera de mi mente, luego poco a poco saca su hielo y enfría mi ilusión. Me dice que no hay nada como la estabilidad emocional y, a veces, yo le creo. La comodidad parece cálida, aun que sea como el hielo seco quemando. Niebla y neblina, bruma y pereza.
NO

Se marcha. reacciono, salgo del trance. Me doy cuenta de ese pequeño capullo de ilusión, todavía ahi. Pequeño, indefenso, con frío invernal. "Quiero que trates de ser feliz" es tu voz.

Un camino lleno de sol otoñal, una brisa de verano, las flores en primavera. Es el mejor momento para plantar un pequeño tuyyo. Regarlo con quizas y tal vez, alimentarlo con muchos tequieros y dejarlo fluir hasta el cielo.

Las cosas pueden marchar y se que el otro yo siempre estará ahi, esperando para decirme al oído tantas cosas que no quiero oír, pero sé que dentro de mi se encuentra la llama que jamas se acaba, que solo necesito amar un poco, para revivir.